lunes, 16 de abril de 2012

Capítulo 20

¡Hola! Os dejo un nuevo capitulo. A ver qué os parece :) Muchas gracias por leer y dejarme vuestros tweets. *-*

Hope you like it!

(Carol)
 
No le veía desde la fiesta de bienvenida de hacía ya más de dos semanas porque se había ido de vacaciones a Italia.

- Vaya, ¡qué sorpresa Dougie!-dije.
- ¿Qué tal estás? Hacía mucho que no nos veíamos.
- Muy bien, ¿y tú? ¿qué tal tus vacaciones? Pero pasa, no nos vamos a quedar aquí en la puerta charlando. –reí mientras pasaba, cerré la puerta y pasamos al salón. Nos sentamos en el sofá.
- La verdad es que me ha encantado Roma, tenías razón, es genial. –dijo.
- Si es que te lo dije, todo aquello es precioso.- Yo había ido de viaje de fin de curso con el instituto hacía ya tres años a Italia y había sido inolvidable.
- ¿Te parece si pedimos unas pizzas y cenamos?
- Por mi perfecto. –Cogió el móvil y encargó una pizza que tardó como una media hora en llegar.

Cuando llegó la pizza, cogimos unas bebidas de la nevera y fuimos de nuevo al salón donde nos pusimos a cenar mientras Doug me contaba todos los sitios que había visitado y me hacía recordar el viaje que hice yo con todos mis amigos. Después de cenar nos quedamos viendo una película que echaban en la tele que la verdad era poco interesante.
Todo iba bien hasta que no sé como, él había empezado a acercarse demasiado a mi, y cuando yo intentaba alejarme, volvía a acercarse.

- ¿Qué haces? –pregunté algo molesta.
- Venga Carol, la última vez dejamos algo pendiente.

Y de repente se abalanzó sobre mi, dejándome debajo de él empezó a besarme de una manera un poco agresiva mientras yo intentaba escabullirme de allí. Entonces un recuerdo, un doloroso recuerdo del pasado vino a mi mente.

“Un año atrás…

Dani y yo habíamos quedado en su casa para cenar juntos y ver de nuevo una película ya que sus padres iban a salir y podríamos estar los dos solos al fin. Llevábamos seis meses saliendo juntos, estaba enamorada, muy enamorada de él y estábamos genial juntos. Después de cenar, nos sentamos en el salón a ver una película. Esa noche le notaba algo diferente, no sabía lo que era, pero se comportaba de una manera distinta conmigo. Un poco aburridos por la película comenzamos a besarnos y despacio hizo que me tumbara en el sofá, quedándose él encima mia. Llevó la mano a mi pantalón y desabrochó el botón.

- Para. –le dije. Le quería, sí, pero aún no me sentía preparada, todavía no.
- Venga, creo que después de estar seis meses juntos me lo merezco, ¿no? –dijo en un tono que no me gustó nada.

Intentaba resistirme, me revolvía debajo de él intentando quitármelo de encima pero obviamente él era más fuerte que yo. Durante unos minutos lo pasé realmente mal y él hubiera conseguido lo que quería de no ser porque afortunadamente su madre había olvidado algo en casa y tuvieron que volver. Después de aquella noche no volví a  saber nada de él y tampoco quería. Estaba destrozada y me costó bastante recuperarme de aquello aunque gracias a la ayuda de mis amigas lo superé.”

Y ahora todo volvía a mi mente, y no creo que esta vez haya alguien para salvarme que no sea yo misma, así que no sé de donde saqué las fuerzas pero conseguí quitármele de encima.

- ¡FUERA! –grité empujándole.
- Carol, yo…lo siento, de verdad, no sé que me ha pasado…-dijo.
- ¡FUERA! –repetí y conseguí que saliera de mi casa.

Cerré la puerta tras de mi, apoyé la espalda en ella y me dejé caer al suelo, quedándome sentada y no pude evitar romper a llorar. Había estado a punto de pasar otra vez. En ese momento sonó el móvil. Me levanté y subí a por él a la habitación, era Emma, me limpié las lágrimas y respiré hondo, no quería que notara que había llorado porque empezaría a preguntar.

(Emma)

Después de cenar y hablar con las demás para quedar mañana, llamé a Carol para contarla los planes que habíamos echo.

- ¡Hola fea! –dije.
- Hola.-contestó con una voz que no me gustaba nada.
- Oye mañana hemos quedado en ir a la heladería esa que tanto nos gusta –notaba como no me estaba prestando atención.- ¿Carol? ¿Estás bien?
- Sí, no te preocupes. –algo me decía que no era así.
- Ah, ¿qué tal con Doug? He visto que iba a tu casa cuando te he dejado. –pregunté y ella empezó a llorar al otro lado del teléfono. – Hey, hey, cariño, ¿Qué ha pasado?
- Dougie…ha…ha…-apenas podía hablar y seguía llorando.
- A ver, cielo, tranquilízate si no, no me entero de nada.-dije intentando calmarla pero era complicado.
- Lo ha intentado, Em, otra vez, casi vuelve a pasar. –No podía ser verdad, ¿en serio que se había atrevido a eso?
- Voy para allá. –dije sin pensarlo dos veces.
- No, no, no hace falta, en serio estoy bien.
- Que sí, no tardo nada. No es bueno que estés sola. –Sabía lo que había pasado con su anterior novio y si la dejaba sola volvería a recordarlo todo, se hundiría y me costaría hacerla salir de casa en los siguientes días.
- No pienso abrirte la puerta si vienes. –Dios, que terca era esta chica, pero se me acababa de ocurrir una idea.
- Mañana por la mañana iré, quieras o no. –dije y sin darla tiempo a replicar colgué y busqué en la agenda del teléfono otro número. Un tono. Dos tonos. ¡Vamos, cógelo!

- ¡Hola Emma!
- ¡Hola Louis! ¿Te he despertado? Siento llamar tan tarde. –me disculpé.
- Tranquila estábamos viendo una película. ¿Ha pasado algo?
- En realidad sí, es Carol. –le conté lo que había pasado.
- ¿Qué? Pero ¡será cerdo!
– Ya me ha dicho que no vaya que no me abrirá la puerta, creo que a ti sería al único al que dejaría entrar y necesita que alguien esté con ella o empezará a darle vueltas a la cabeza.
- No te preocupes, voy ahora mismo para allá.
- Gracias Louis. –dije y colgué.

(Louis)

Harry y yo estábamos aburridos, tumbados en el sofá viendo una película bueno, mejor dicho, riéndonos por lo mala que era pero no había nada mejor y no teníamos sueño. Entonces sonó el móvil. ¿Quién sería a estas horas?

- ¡Hola Emma! –No esperaba que fuera ella, la verdad.
- ¡Hola Louis! ¿Te he despertado? Siento llamar tan tarde. –se disculpaba.
- Tranquila estábamos viendo una película. ¿Ha pasado algo? –dije ya que la notaba algo nerviosa.
- En realidad sí, es Carol. –empezó diciendo y termino contándome todo lo que había pasado.  ¡Menudo capullo!
- ¿Qué? Pero ¡será cerdo! –dije enfadado.
– Ya me ha dicho que no vaya que no me abrirá la puerta, creo que a ti sería al único al que dejaría entrar y necesita que alguien esté con ella o empezará a darle vueltas a la cabeza.
- No te preocupes, voy ahora mismo para allá. –dije de inmediato.
- Gracias Louis. –dijo y colgó.

Me levanté del sofá y subí corriendo a mi habitación, abrí el armario y cogí lo primero que pillé, una camiseta y unos vaqueros.

- ¿Qué pasa? –me preguntó Harry.
- Me tengo que ir. –dije poniéndome las zapatillas.
- ¿A estas horas? ¿A dónde?
- Carol me necesita, ya te lo explicaré mañana.
- ¿Le ha pasado algo? –preguntó preocupado.
- No tengo tiempo para decírtelo ahora. No te preocupes, estará bien.

Cogí las llaves del coche, salí de casa y puse rumbo a la casa de Carol. Llegué antes que ninguna de las veces anteriores que había ido hasta allí. Sería por que iba pensando en todo momento en cómo debía sentirse en estos momentos. ¿Cómo pueden ser así algunos chicos? No me lo explico, de verdad que no. Llamé al timbre. Una vez. Dos. Tres. Cuatro. Nada, no me abría. Pero no me iba a dar por vencido tan pronto y volví a llamar. Solo dos veces en esta ocasión.

- ¡Lárgate Emma! ¡Quiero estár sola!-gritó abriendo la puerta.-¡Te dije que no…-No terminó la frase al verme.

1 comentario:

  1. Me eeeeeeeeeenncantaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!

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